:::: GUIA DEL OCIO
Amigos de toda la vida. Pasa pocas veces que los clientes mantengan la fidelidad a una sala durante años y años. Por eso sorprende entrar en Trauma y comprobar que el público que abarrota el local un día entre semana para festejar el 27 Aniversario se conoce y, con frecuencia, se saluda afectuosamente intercambiando noticias y novedades. Y es que muchos de ellos han crecido con Trauma y algunos hasta habrán vivido su história completa. Trauma era, el pasado martes, 30 de noviembre, un mar de vestidos de noche, collares, pulseras, pendientes, trajes y corbatas, una nube de perfumes y colonias. Y es que aquí la gente se viste y se prepara para salir de fiesta, ante la posibilidad de que esa noche sea la gran noche en la que aparezca alguien especial. Y es que en Trauma la media de edad de los noctámbulos es algo más alta que los jovencísimos locales de Ciutat Vella, pero aquí se concentran más ganas de fiesta que en el resto de locales juntos. Aquí se liga, y mucho. Y se baila. Y se bebe. Y se charla con los amigos. Y es que de eso, de amigos, está sobrada esta veterana sala. Amigos como el periodista Albert Castillón o como el peluquero Urbea o como el director de cine porno Conrad Son o como tantos otros que recibieron durante la fiesta de aniversario uno de los premios que anualmente concede Trauma. El diario Sport y la revista Gala (representada por una Merche Mar que está en plena forma) fueron otros de los premiados en una noche memorable en la que hubo hasta drag queens. Si esto es una fiesta de 27 cumpleaños, no quiera usted saber qué pasará el día que la sala cumpla 30... Xavier Muniesa.
:::: MULTITUDINARIO ANIVERSARIO CON GOGÓS Y PREMIOS
La discoteca Trauma convoca a sus amigos para celebrar los 27 años con pastel y garbanzos. El decorador Rafael Salanova no pudo ocultar cierto orgullo el martes por la noche. Trauma, una de sus más renombradas criaturas, imperio de la moqueta, el espejo y los sofás mullidos, festejaba sus primeros 27 años de existencia, muchos para estar todavía en la liga del ocio nocturno barcelonés.
La discoteca comenzó en los tiempos de la fiebre del sábado noche, los travoltas y los trajes blancos, resistió experiencias rompedoras como la elección de Miss Travesti y, remozada con telas rojas y algún que otro detalle, todavía resiste en el nuevo siglo, como un clásico, de la mano de José Luis Pallí.
Por el llenazo, además de la cola que se formó en la calle a la espera de tomar el relevo lúdico, no faltó nadie a la cita, en la que hubo animación a cargo de falsos gorilas, damas dignas de fascinar a Casanova, gogós en topless y un peculiar picoteo en el que no faltaban platos con potaje de garbanzos junto a propuestas más convencionales.
Además de celebrar el aniversario y convocar a amigos como los cineastas Carlos Benpar y Santiago Lapeira, la vedete Merche Mar y el grupo Huapachá Combo, Trauma aprovechó para entregar sus premios anuales, que recayeron en Albert Castillón --que puede poner su Trauma junto al Ondas--, el peluquero Josep Urbea, el diario Sport, el director Conrad Son --que está metido en el proyecto del Gran Hermano erótico-- y el director teatral Ricard Reguant. C. NÚÑEZ

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